La alerta es mínima cuando se desconoce la gravedad de la situación. Sin embargo, la desesperación comenzará a manifestarse una vez los gritos aumenten... una vez los llantos no cesen...
Uno puede ser muy metódico y ordenado, pero si entras en ese estado... se hará complicada la salida del mismo. Podrías estar corriendo en círculos con una expresión aterradora en el rostro y ni siquiera saberlo. Según tú, estás haciendo algo útil, pero solo dejas que la desesperación comience a fluir en ti. ¡Qué bien se siente! Se preguntarán a qué me refiero... Pues, se siente bien observar este tipo de reacciones y permanecer en calma.
sábado, 22 de marzo de 2014
¿Cambio? ¡No!
Algunos creen que pueden cambiar la manera de pensar de las personas, ¿no? ¡Pobres! No se dan cuenta de que eso es prácticamente imposible. Bueno, hay ciertas personas que no tienen todas las cosas bien definidas, pero no todos son así. Varios tenemos en claro lo que queremos, lo que pensamos, cómo actuamos... Uno no puede simplemente decir: "Cambiaré a esta persona." No. He escuchado esto de personas que quieren ser positivas, de personas que quieren cambiar a alguien "malo"... Y si quieren intentarlo, ¡bueno! Sin embargo, no estoy de acuerdo con esa manera de ver las cosas.
martes, 18 de marzo de 2014
Linda virtud, pero...
Cada persona debería saber el lugar que tiene en este mundo. Los que están destinados a ser inferiores que otros no deberían creerse más que nadie. Lo sé. El esfuerzo puede hacer que personas con pocas habilidades lleguen a lo alto, ¿no? Sí, sí... Pero, ¿acaso porque la perseverancia es una muy buena característica, todos deberían pensar que tienen oportunidad? No es así. No digo que los que no son muy competentes mueran, ni nada de eso. Solo creo que no deberían suponer que todos pueden sobrepasar sus límites y llegar a ser alguien completamente extraordinario. ¿Hay excepciones? Pues, claro. Y yo apoyo a los que quieren salir de sus problemas, siempre y cuando esté dentro de su capacidad. No me gusta cuando la gente abusa del optimismo y cree que puede llegar a hacer cualquier cosa si se lo propone porque no siempre se logra. Sí, varios se molestarían con este tipo de pensamiento, pero sólo digo lo que creo. En fin, yo no estoy para detener el empeño de las personas, mucho menos para decirles que no pueden hacer algo...
sábado, 15 de marzo de 2014
¿Dar sin recibir algo a cambio?
Me alimento de los halagos que cada uno hace. Uno podría pensar que algún día moriré sin ellos, pero en cada nueva generación, tengo fieles seguidores que me seguirán dando vida durante un tiempo... No hace falta que me den dinero, no hace falta que hagan grandes sacrificios por mí, lo único que necesitan hacer es exaltarme con sus alabanzas, reconociendo que solo yo podría ayudarlos en momentos difíciles. Tampoco es como si me gustara ayudar a las personas, ¡eh! Podría aceptar una que otra petición.
Sin embargo, cada uno tiene consentidos, ¿no? Existen unos pequeños a los que defiendo sin que me lo pidan. ¿Por qué? Pues... sucede que sus enemigos son demasiado para ellos. Me parece algo injusto. Les ganan en fuerza, agilidad, velocidad, cantidad... Y, aunque no me pidan auxilio de la manera que me gusta, quiero que sigan con vida. Supongo que bajo toda esta vanidad tengo bondad, ¿no? Después de todo, no soy tan malo.
Sin embargo, cada uno tiene consentidos, ¿no? Existen unos pequeños a los que defiendo sin que me lo pidan. ¿Por qué? Pues... sucede que sus enemigos son demasiado para ellos. Me parece algo injusto. Les ganan en fuerza, agilidad, velocidad, cantidad... Y, aunque no me pidan auxilio de la manera que me gusta, quiero que sigan con vida. Supongo que bajo toda esta vanidad tengo bondad, ¿no? Después de todo, no soy tan malo.
martes, 11 de marzo de 2014
¿Tanta ira, otra vez?
Observa a la gente. No, mejor no observes a nadie. ¡Qué flojera! Sin embargo, date un tiempo para escuchar las ideas que defienden. Mira, sé que no son las correctas. Es más, quizá pocas se acerquen a la ideal, pero presta atención. Como te habrás dado cuenta, varias personas hablan y hablan de sus principios y todo, pero dejan atrás los valores principales. Y tú sabes a quiénes me refiero. Bueno, ¿qué se puede hacer? Pues, absolutamente nada. Ese tipo de gente se apega mucho a sus creencias y no deja que ningún pensamiento diferente entre en sus mentes. Así que, solo te digo que conozcas esas maneras de pensar porque tu descendencia no puede dejarse influenciar por ellas. ¡Ten en claro algo! No te estoy diciendo que escuches y veas algo de cierto en todos sus argumentos, sólo que los conozcas. Claro, los que llamen tu atención, los que sean dueños de las mentes de las personas cercanas a ti y los más populares. Si supieras que pienso igual que tú... Las personas de vez en cuando merecen sufrir, ¿verdad? Lástima que no podamos hacer mucho. Los de mente cerrada no escucharían. Además, no podemos hacerles daño físico, ¿no?
sábado, 8 de marzo de 2014
¿Demostrar sentimientos?
¿Desapareció? No es como si lo quisiera cerca, pero... me pregunto dónde estará. No suelo decir lo que siento ni nada, pero la gente lo sabe, ¿no? Al menos, eso es lo que pienso. Algunas personas me han dicho que es necesario y eso, pero... ¡Ah!, no sé.
—Unas palabras de cariño nunca están de más, ¿sabes?
—¿Eh? ¿Quién dijo eso?
—No trates de buscarme, no me verás.
—Buena broma, pero no estoy con ganas.
—No es una broma. Considérame una voz que intenta ayudarte.
—¿Ayudarme? ¿Cómo?
—Diciéndote que deberías afirmar tus sentimientos de vez en cuando, en especial con las personas que te importan.
—No debería, ellos ya lo saben. No tengo que ponerme cursi y decirlo una y otra vez.
—No lo veas como algo ridículo.
—No importa lo que tú digas, voz misteriosa.
Escucharé música, quizá así se calle.
¿Y si es verdad? Me dijeron que, cuando una persona no está segura de lo que alguien siente, podría sentirse confundida, triste... ¿Por qué sería necesario escuchar los sentimientos? No es que no sienta nada por él, pero no me gusta decirlo. ¿Y si desapareció porque hice que se sienta mal? No creo. Quizá sí lo extraño...
—Quizá sí lo... extraño.
—¡Hola!
—¿Eh? ¿Estabas... ahí?
—Sí, quise tener un día tranquilo, así que vine a esta parte de la ciudad. He estado echado aquí toda la tarde, solo viendo el cielo.
—Oh... bueno.
—¿En serio me extrañaste?
—Eh... quizá un poco. Me preocupaba porque no sabía dónde estabas.
—No te preocupes. A la próxima te aviso si quiero tomarme un día así, ¿ya? Es más, vendré contigo.
—No hace falta. Bueno... me voy.
—¿Por qué? ¿No me echabas de menos? Yo a ti sí. Acompáñame.
—Está bien.
Después de todo, sí escuchó lo que siento, ¿no? ¿Eso basta? Me alegro de estar aquí de todos modos.
—Unas palabras de cariño nunca están de más, ¿sabes?
—¿Eh? ¿Quién dijo eso?
—No trates de buscarme, no me verás.
—Buena broma, pero no estoy con ganas.
—No es una broma. Considérame una voz que intenta ayudarte.
—¿Ayudarme? ¿Cómo?
—Diciéndote que deberías afirmar tus sentimientos de vez en cuando, en especial con las personas que te importan.
—No debería, ellos ya lo saben. No tengo que ponerme cursi y decirlo una y otra vez.
—No lo veas como algo ridículo.
—No importa lo que tú digas, voz misteriosa.
Escucharé música, quizá así se calle.
¿Y si es verdad? Me dijeron que, cuando una persona no está segura de lo que alguien siente, podría sentirse confundida, triste... ¿Por qué sería necesario escuchar los sentimientos? No es que no sienta nada por él, pero no me gusta decirlo. ¿Y si desapareció porque hice que se sienta mal? No creo. Quizá sí lo extraño...
—Quizá sí lo... extraño.
—¡Hola!
—¿Eh? ¿Estabas... ahí?
—Sí, quise tener un día tranquilo, así que vine a esta parte de la ciudad. He estado echado aquí toda la tarde, solo viendo el cielo.
—Oh... bueno.
—¿En serio me extrañaste?
—Eh... quizá un poco. Me preocupaba porque no sabía dónde estabas.
—No te preocupes. A la próxima te aviso si quiero tomarme un día así, ¿ya? Es más, vendré contigo.
—No hace falta. Bueno... me voy.
—¿Por qué? ¿No me echabas de menos? Yo a ti sí. Acompáñame.
—Está bien.
Después de todo, sí escuchó lo que siento, ¿no? ¿Eso basta? Me alegro de estar aquí de todos modos.
martes, 4 de marzo de 2014
¿Algo o alguien desconocido?
Hace días vengo sintiendo algo extraño. Es como si alguien me siguiera. No es que haya visto a alguien ni algo parecido, pero es la sensación.
Ayer estaba en mi escritorio, con los pies descalzos, y sentí que algo se movía por el suelo. Sentí un pelaje, como si fuera un animal, deslizándose por mis pies. ¿Raro? Quise ver si había, en efecto, algo. Revisé incluso toda la habitación, pero no encontré nada fuera de lo común. Salí a caminar en la noche. No me molesté en cambiarme de ropa por algo más abrigador. Después de todo, estos días habían sido calurosos. Sin embargo, se sintió una fría brisa. Me arrepentí de no haber llevado aunque sea un chaleco. De pronto, ya no era capaz de sentir el ambiente tan frío. Fue como si hubiera entrado a un lugar con calefacción, pero seguía en la calle. No me demoré en ir a casa, de todas formas.
Hoy salí a caminar de nuevo, muy temprano. Todo estaba nublado, sólo quería caminar escuchando música. Pero, en lo que pasaba el tiempo, fue subiendo la temperatura.
¿En serio? ¿Soy la menos afortunada?
El día estaba bonito, pero no me gusta estar en pleno sol. Intenté hacerme algo de sombra con las manos, al menos para mis ojos. De pronto, todo se sentía más... fresco.
¿Eh? ¿Otra vez esto?
Cuando tenía la mirada hacia abajo y me cubría la vista, veía cómo una sombra se posaba sobre mí. ¿Saben? Era una sombra con forma de sombrilla. ¿Muy obvio? Lo malo es que, cada vez que subía la mirada o volteaba, nadie estaba ahí.
Me preocupa porque, aunque lo que ha estado pasando es algo bueno para mí, no veo a nadie cerca en esos momentos. ¿Será que esa ayuda viene de... otra dimensión?
Ayer estaba en mi escritorio, con los pies descalzos, y sentí que algo se movía por el suelo. Sentí un pelaje, como si fuera un animal, deslizándose por mis pies. ¿Raro? Quise ver si había, en efecto, algo. Revisé incluso toda la habitación, pero no encontré nada fuera de lo común. Salí a caminar en la noche. No me molesté en cambiarme de ropa por algo más abrigador. Después de todo, estos días habían sido calurosos. Sin embargo, se sintió una fría brisa. Me arrepentí de no haber llevado aunque sea un chaleco. De pronto, ya no era capaz de sentir el ambiente tan frío. Fue como si hubiera entrado a un lugar con calefacción, pero seguía en la calle. No me demoré en ir a casa, de todas formas.
Hoy salí a caminar de nuevo, muy temprano. Todo estaba nublado, sólo quería caminar escuchando música. Pero, en lo que pasaba el tiempo, fue subiendo la temperatura.
¿En serio? ¿Soy la menos afortunada?
El día estaba bonito, pero no me gusta estar en pleno sol. Intenté hacerme algo de sombra con las manos, al menos para mis ojos. De pronto, todo se sentía más... fresco.
¿Eh? ¿Otra vez esto?
Cuando tenía la mirada hacia abajo y me cubría la vista, veía cómo una sombra se posaba sobre mí. ¿Saben? Era una sombra con forma de sombrilla. ¿Muy obvio? Lo malo es que, cada vez que subía la mirada o volteaba, nadie estaba ahí.
Me preocupa porque, aunque lo que ha estado pasando es algo bueno para mí, no veo a nadie cerca en esos momentos. ¿Será que esa ayuda viene de... otra dimensión?
sábado, 1 de marzo de 2014
¿Mala actitud?
Es increíble. Pensé que era una persona fría y, a veces, dura para hablar. Bueno, eso es lo que algunos me han dicho. No puedo evitar hablar de cierta manera, pero suelo darme cuenta si las personas se sintieron incómodas cuando lo demuestran de una manera obvia.
Sé que le dolió y se entristeció por cómo le hablé ese día. La verdad es que no tenía ganas de ser amable con nadie... Él solo quería contarme novedades en su vida, pero yo no quería prestar atención a ninguna noticia que no fuera sobre mí. No me importaba la vida de nadie más. Suelo tener días así, pero sé cómo simular interés. Sin embargo, justo ese día, no fue así.
Han pasado unos días, y pensé que tenía que disculparme. ¿Me costaría? De hecho, pero si en realidad me importaba, iba a tener que esforzarme en eso.
¿Por qué viene con esa sonrisa?
—Hola.
—¡Hola! ¿Cómo estás?
—Bueno... bien.
—¿En serio? Hace días estabas de mal humor, ¿verdad?
—Uhm... sí, cosas de la vida.
—Entiendo. Lo bueno es que ahora estás mejor. ¿Salimos?
Podría jurar que estaba molesto en ese entonces. ¿Cómo pudo venir hacia mí con ese buen ánimo? Ni siquiera tuve que pedirle disculpas, y sé que no lo traté de una linda forma. ¿Será que le importo tanto? Uhm... supongo que trató de comprender qué me pasaba. Quizá solo vino con una actitud positiva para ver cómo le resultaba. ¿Uno puede pasar por alto ese tipo de cosas? Las personas cercanas a mí no me han dado el trato que yo les doy nunca, creo. Y no les conviene. No creo ser del tipo vengativo, pero exigiría palabras de arrepentimiento. Sin embargo, él perdonó esa actitud mía sin que yo lo mencionara. ¿Así es como debe ser un amigo?
Sé que le dolió y se entristeció por cómo le hablé ese día. La verdad es que no tenía ganas de ser amable con nadie... Él solo quería contarme novedades en su vida, pero yo no quería prestar atención a ninguna noticia que no fuera sobre mí. No me importaba la vida de nadie más. Suelo tener días así, pero sé cómo simular interés. Sin embargo, justo ese día, no fue así.
Han pasado unos días, y pensé que tenía que disculparme. ¿Me costaría? De hecho, pero si en realidad me importaba, iba a tener que esforzarme en eso.
¿Por qué viene con esa sonrisa?
—Hola.
—¡Hola! ¿Cómo estás?
—Bueno... bien.
—¿En serio? Hace días estabas de mal humor, ¿verdad?
—Uhm... sí, cosas de la vida.
—Entiendo. Lo bueno es que ahora estás mejor. ¿Salimos?
Podría jurar que estaba molesto en ese entonces. ¿Cómo pudo venir hacia mí con ese buen ánimo? Ni siquiera tuve que pedirle disculpas, y sé que no lo traté de una linda forma. ¿Será que le importo tanto? Uhm... supongo que trató de comprender qué me pasaba. Quizá solo vino con una actitud positiva para ver cómo le resultaba. ¿Uno puede pasar por alto ese tipo de cosas? Las personas cercanas a mí no me han dado el trato que yo les doy nunca, creo. Y no les conviene. No creo ser del tipo vengativo, pero exigiría palabras de arrepentimiento. Sin embargo, él perdonó esa actitud mía sin que yo lo mencionara. ¿Así es como debe ser un amigo?
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